Es inevitable no pensar en Drácula cuando mencionamos Transilvania, pero aparte de vampiros y castillos misteriosos, en el corazón de esta ciudad también se encuentra un bosque místico llamado Hoia- Baciu.
También
conocido como El triángulo de las bermudas de Transilvania – debido a la gran
cantidad de fenómenos extraños que suceden en este lugar-, este espeluznante
bosque cuenta con poco menos de 300 hectáreas y esta ubicado en la ciudad de
Cluj, considerada una provincia histórica de Transilvania, rodeada de
vegetación.
Origen de sus misterios.
Nos remontamos
al pasado, cuando un pastor y su rebaño de 200 ovejas se adentraron en el
bosque y desaparecieron sin dejar rastro. Desde ese entonces, a Hoia-Baciu se
le conoce también como el triángulo de las bermudas de Transilvania.
Diferentes fenómenos.
Más
adelante, se darían a conocer las primeras leyendas que hablan de un bosque “envenenado”.
Se dice que
han sido muchos los “curiosos” que han salido del bosque con los mismos síntomas:
ansiedad, náuseas, dolores de cabeza y con heridas de quemaduras, ampollas y
erupciones, es por eso que se ha llegado a investigar la flora del lugar,
descartando que algunas plantas sean venenosas. A su vez, las evidencias que
han solicitado algunos investigadores, han descartado que sea sugestión de la
mente de los testigos, al comprobar que las plantas del lugar se encontraban
deshidratadas y por lo mismo no podían causar estas reacciones hacia la gente.
Otra
historia nos cuenta de una gran masacre de campesinos que se dio en este lugar,
se dice que se cometieron atrocidades hacia ellos y sus familias, causando que
estos se hagan presentes entre los árboles y dañando a quien se atreva a entrar
a esta zona.
Otro extraño
suceso nos habla de risas femeninas que rompen un silencio muy pesado en el
ambiente, y que envuelven el bosque durante el día o la noche.
El fenómeno
más común es el conocido como “tiempo perdido” – personas que tienen la
sensación de haber pasado solo unos minutos en el bosque, pero en realidad han
pasado horas -.
Una leyenda
muy famosa del lugar, nos cuenta de una niña de aprox. 6 años, ella vagaba por
el bosque y se perdió, ella asegura que solo fueron unos días los que estuvo
desaparecida, pero la realidad nos dice que estuvo perdida 5 años. La niña no
recordaba nada de donde estuvo todo ese tiempo, y a su vez, al momento de
encontrarla, ella se encontraba con la misma ropa con la que se perdió.
A esta
historia la respalda los testimonios de la policía, donde han respondido a
reportes de ayuda que reportan familiares o conocidos perdidos en este lugar,
cuando la policía los encuentra, estas personas aseguran haber estado solo un
par de horas, cuando la realidad dice, que ha pasado más tiempo de lo que ellos
pensaban.
Investigaciones.
Son muchos
los expertos los que hacen caso omiso a las advertencias de los lugareños y se
adentran al bosque a investigar.
Alejandro Sift
– biólogo y uno de los investigadores dispuesto a encontrar evidencia lógica -.
Tomó una gran
cantidad de fotografías, y detectó anomalías electromagnéticas, pero según su
testimonio, vio con sus propios ojos extrañas sombras entre los árboles y asegura
haber escuchado susurros dentro de su tienda de campaña.
A su vez,
al momento de revelar estas fotografías, en su carrete aparecieron imágenes de
lugares del bosque, donde el asegura, no había estado.
Miedoscopers,
serían capaces de pasar una noche en este bosque - La cual, tal vez, se
convierta en 1 año o más de su vida.
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